domingo, 20 de marzo de 2011

BIOLOGÍA Y CIVILIZACIÓN



A finales del siglo XIX e inicios del XX corrientes de pensamiento como el darwinismo y el socialismo están ya arraigadas en el pensamiento general. Entre las teorías de geopolítica que destacan en la época nos encontramos aquellas que consideran a los países y los estados como organismos biológicos. Nacen, pasan por la infancia, por la pujante adolescencia, si sobreviven se hacen adultos y fuertes, se vuelven dinosaurios formales y rígidos, envejecen, y mueren.

Hablemos entonces de cristianismo. En su etapa adolescente, la Edad Media, sin ir más lejos se destruyó muchísimo patrimonio clásico. Si se conservaron algunas murallas es porque todavía servían de murallas. Pero desde un punto de vista artístico, y eso lo dicen muchísimos estudiosos de Historia del Arte, lo mejor que le pudo pasar a muchos monumentos es que cayesen bajo el influjo musulmán, porque se salvaron. Los árabes en aquella época consideraban la cultura por sí misma, mientras que los cristianos todo lo anterior a la venida de Cristo no tenía validez.

Constantino fue uno de los mayores destructores de patrimonio que conocemos. Se comportó de la forma más atroz con la cultura clásica, y destruyó monumentos en tierra santa todos los que nos podamos imaginar y más. Y su madre Helena más todavía, se puso a excavar, y todo lo que fuera clásico se destruyó.

Y es que toda cultura intenta imponerse a la anterior. Son muy pocos los ejemplos de adopción o sincretismo cultural por parte del invasor, y en esos casos suele ser por la falta de sofisticación de la cultura invasora, como pasó por ejemplo con los visigodos o los mongoles.

Un ser humano sólo tiene una cultura, no puede tener cinco culturas. El problema es que hoy en día la gente, como no tiene ninguna, habla de mestizaje.

El cristianismo fue una nueva forma cultural. En muchos casos más poderosa que la anterior. El cristianismo desarrolla su cultura y una vez tiene la oportunidad lo que intenta es imponerse, mediante un desarrollo político, mediante un arte, mediante una manifestación científica y filosófica (San Agustín, San Anselmo, Santo Tomás de Aquino,…), y finalmente se impone.

En su día los cristianos pensaron que el mundo clásico había llegado a un punto de no retorno de degeneración e inmoralidad, y exigía la imposición inevitable de la revolución cristiana.

Hoy en cambio se vende la idea opuesta, el cristianismo trajo la decadencia cultural y científica, el cristianismo trajo el “Retroceso”. Ese discurso que lleva ya muchos años en funcionamiento, dio su salto al cine con la película ‘Ágora’ de Alejandro Amenábar.

Alguno podría decir que la dinastía de toda la historia de la humanidad que más ha practicado el incesto y por tanto ha dado mayor proporción de subnormales entre sus gobernantes era la dinastía ptolemaica de Alejandría.

Pero no es eso lo importante, lo importante es que los libros de historia consisten fundamentalmente en desmentir los libros de historia anteriores. El cristianismo lo hizo con la cultura clásica, y Amenábar hace lo propio con el cristianismo. Así funciona la sucesión de las culturas.

Seamos sinceros, ¿alguien piensa que se puede transmitir un mensaje teologal cristiano, de fe, de nacimiento, de vida, de muerte, del más allá, diciendo que usted si quiere puede seguir creyendo en Epicúreo, o en los estoicos? ¡Cómo si fuera una opción! Como si hubiera un mercadillo de las culturas...

Cuando algo cae es porque ya está en su declive, el que estaba declinando era ese mundo, que cae porque históricamente está fallecido. Las teorías de la geopolítica del siglo XIX nos decían que los Estados son órganos vivos. Nacen, se desarrollan, crecen, se reproducen incluso, y mueren.

Si el mundo clásico fuera fuerte, no habría caído, pero cayó. Y la Alejandría del siglo III y IV formaba parte de una sociedad y un mundo que estaba muriendo. Y el cristianismo era un movimiento con una fortaleza sin precedentes, con una ilusión y energía que le hacía colarse por todas partes. Estaba creciendo, era un adolescente, tomando cuerpo, echando músculo, mientras que el mundo clásico era un ser anciano, decrépito, sin fuerzas, ni ganas, ni brillo, y que finalmente muere y es sustituido.

También pasa en el arte. Hay una etapa de iniciación, luego hay un período de consolidación, una etapa clásica, una etapa de manierismo, y al final hay una etapa de decadencia en donde nace otro y le sustituye.

Pero la gente tiene que coger un arte o un periodo histórico que le guste (los romanos, los griegos, Al-Ándalus, etc.) y entonces como le gusta lo ensalza y tiene que criticar y difamar a los que se lo cargaron.

Pero la historia no es ni bonita ni fea, es la que es. Hay pueblos que desaparecen, ideas que nacen… Y desaparecen, y se olvidan, y luego son rescatadas, y luego volverán a desaparecer y ser olvidadas. Nada está arriba siempre.

Primavera, de Alma Tadema

sábado, 11 de diciembre de 2010

EL VIEJO MITO DEL BUEN SALVAJE



No te dejes sobornar con regalos, porque el regalo enceguece al que ve con claridad y pervierte las causas de los justos.



Presentar a un aborigen como un desecho de virtudes es una de las obsesiones típicas de los que sólo han conocido la ciudad, aquellos que no han vivido en un pueblo, ni han ido al campo, ni al bosque en toda su vida.

Presentan el concepto del bien (la naturaleza) y el mal (la ciudad). En ese orden moral de las cosas, el hombre que no hace daño a la naturaleza, que utiliza bien sus recursos naturales, que la rinde culto, etc. es el hombre moral.

Pero los pueblos primitivos no es que respeten la naturaleza, simplemente les faltan conocimientos técnicos para poder manipularla. Cuando se les ha dado o los han ido adquiriendo, han manipulado la naturaleza igual que nosotros. Lo que pasa que cuando tienes un hacha, una lanza y una canoa no tienes la misma capacidad que con un bull-dozer, con compuestos químicos, con amianto.

Porque la vida en la naturaleza es muy dura. Nanuk el esquimal murió dos años después del documental mundialmente famoso de los años veinte, porque se murió de hambre cuando se fue a cazar unas focas en el interior de la bahía de Hudson. Los aborígenes por mucho que dominen la naturaleza suelen tener una esperanza de vida muy baja.

Y es que el gran humanismo es aquel donde un ser humano pueda acabar siendo un ser humano en cualquier sitio del mundo, en cualquier entorno y situación. Aquel que necesita estar en la naturaleza para encontrarse a sí mismo acaba siendo un animal. Un ser humano se distingue por su capacidad de raciocinio, de adaptación, de polivalencia, de aprendizaje, de superación. El hombre que puede vivir y desenvolverse en el bosque, y tocar el piano en su casa. Como hacían los grandes aventureros y descubridores de antaño, que sabían hacer de todo, vivir en la ciudad, tomarse una copa de champán en un hotel de 5 estrellas, y luego tirarse 10 meses de expedición en los rincones más vírgenes e inhóspitos de la naturaleza.

El Tarzán original de Burroughs cuando va al mundo moderno se adapta, aprende idiomas, conduce, bebe, etc. Pero acaba yéndose porque allí no es el rey. No es capaz de hacer comprender a la gente los valores naturales, el sentido del deber, de la lucha… Lo que se encuentra es una sociedad acomplejada, burguesa, corrupta. Por eso Tarzán vuelve a la naturaleza, no afligido, ni triste, ni incapaz de adaptarse, sino enfadado y asqueado.  Él puede eligir.

miércoles, 1 de diciembre de 2010

CRISTIANISMO "SELF-SERVICE"



Cuando recojas la cosecha en tu campo, si olvidas en él una gavilla, no vuelvas a buscarla. Será para el extranjero, el huérfano y la viuda, a fin de que el Señor, tu Dios, te bendiga en todas tus empresas.


Hoy, desde un punto de vista oficial, el Vaticano reconoce que la lectura de la Biblia en una traducción oficial es válida. Ese punto, que costó sangre, sudor y lágrimas desde el siglo XVI, no lo tiene hoy todavía el Islam.

Pero el protestantismo fue un poco más lejos todavía, reconoció que tú en tu casa puedes leer la Biblia, y te puede llegar la inspiración. El catolicismo no reconoce eso, una cosa es que uno pueda leer la Biblia en su casa, traducida al español, al francés o al idioma que sea, y otra cosa es que uno esté capacitado para entender sus mensajes.

Es decir, el católico sólo es católico en comunidad, con la Iglesia, con su gente. Por eso una de las claves de Lutero al romper con la Iglesia era traducir al idioma vulgar la Biblia, porque la gente tiene derecho a leerla por sus medios. San Juan de la Cruz, Fray Luis de León o Santa Teresa de Ávila también tuvieron problemas por eso, porque iban de individualistas leyendo la Biblia cuando la Iglesia dice que eso no se puede hacer, que hay que leerla en grupo, y hay que leerla con expertos.

De hecho en el cristianismo ortodoxo siguen insistiendo en apenas imprimir Biblias, y que la gente vaya a leer y escuchar la Biblia a la Iglesia. Y es que en el fondo es verdad que si empiezas a repartir por ahí la Biblia y las oraciones la gente deja de venir al templo, y lo que quieren es que vayan allí. Eso de que tú te autoabastezcas en casa con tus minutos de fe no nos vale.

Otro debate sería el de cómo el protestantismo en su día intenta volver a los orígenes y a la literalidad de las escrituras cuando se habían desvirtuado a través de la intermediación de una institución de poder, como era la Iglesia, y sin embargo luego con el paso de los siglos se distancian mucho más. Hoy en día los protestantes son los que más alejados están del cristianismo primitivo.

jueves, 18 de noviembre de 2010

EL INVENTO DE LA GUERRILLA



Los creyentes que se quedan en casa, sin estar impedidos, no son iguales que los que combaten por Alá con su hacienda y sus personas.


La guerra de guerrillas ha existido siempre. ¿Qué hacían los judíos con los romanos? ¿Qué eran los zelotes? Guerrillas, ni más ni menos.

¿Qué más guerrilla hay que la batalla del bosque de Teutoburgo? Los germanos meten en un bosque a los romanos, hacia un desfiladero, se hace más espeso, empieza a llover, y empiezan a atacarles y se retiran, a atacarles y se retiran, hasta que matan a quince mil romanos. Eso es guerra de guerrillas. No es ni un ejército regular, ni una batalla organizada, ni un frente claro.

Y así en mil épocas y países, siempre que todo ejército no regular se ha visto con una inferioridad numérica y/o cualitativa importante frente a su enemigo. Pero no porque lo piense, no es una cuestión de “voy a crear la rueda”, no es un invento, no es la radio, simplemente surge como una necesidad.

Seguro que los primeros australopithecus cuando se enfrentaron 40 contra 7 la cosa acabó deviniendo en emboscadas y retiradas, ataques sorpresa, ventaja en terrenos desnivelados o una lluvia de rocas.

Es cierto que a partir de la Edad Media surge un mundo bélico más o menos estabilizado, con frentes y campos de batallas bien definidos, dos ejércitos y un vencedor. Pese a ello nunca dejarían de existir del todo ejemplos de guerrillas.

A partir del siglo XIX vuelve a resurgir con fuerza la guerra de guerrillas, y ya en la segunda mitad del siglo XX es la táctica universal de hacer la guerra en multitud de conflictos de media y baja intensidad por todo el mundo.

Pero no nació en el XIX. Lo de que inventamos los españoles la guerra de guerrillas en la Guerra de la Independencia pues no es nada menos que otra frase hecha y chovinista de las que está lleno el mundo y que han llegado a enseñarse en los libros de texto.

domingo, 7 de noviembre de 2010

HÉROES QUE NO MOLESTAN A NADIE



Cuando el Señor vio qué grande era la maldad del hombre en la tierra y cómo todos los designios que forjaba su mente tendían constantemente al mal, se arrepintió de haber hecho al hombre sobre la tierra, y sintió pesar en su corazón.


Alejandro es un tipo sin nacionalidad, si Alejandro fuera romano, francés o alemán, sería maltratado y vilipendiado, pero no deja de ser un antiguo griego macedonio, y por eso realmente no molesta a nadie, se le puede ensalzar y caer bien a todo el mundo.

También le pasa a Aníbal, un tipo de una civilización que no ha dejado ningún legado, y así vemos como en muchísimas publicaciones y entre muchísimos aficionados a la historia militar, ¿el mejor general del mundo? Aníbal.

Lo que pasa que hoy Aníbal resulta más belicoso y políticamente incorrecto (por eso gusta tanto a los frikis de la historia militar) y en cambio Alejandro con sus viajes por medio mundo, su juventud, sus amoríos, su muerte trágica y antes de tiempo, es casi Kurt Cobain o James Dean, un chico rebelde y romántico.
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domingo, 24 de octubre de 2010

La barca alegre, de Albert Lynch


UNIVERSITARIOS DE AYER Y DE HOY



Un pueblo numeroso como el polvo de la tierra.


Mayo del 68. De acuerdo, fue una rojería de niños burgueses en tiempos de pleno empleo. Pero lo cierto es que tenía un punto totalmente intelectual que hoy hemos perdido por completo. Los que no llevaban debajo del brazo un libro de Albert Camus, de Jean Paul Sartre, de Simone de Beauvoir, de Michel Foucault lo llevaban de Lenin, de Marx, de Mao, de Trotsky.

Hoy en cambio en las protestas estudiantiles lo que se lleva debajo del brazo es media chapa de hachís.

Y es que antes ser estudiante estaba ligado con la intelectualidad. Se hacían grupos de debate, se creaban asociaciones, se participaba en política y se leía, se leía mucho, no sólo de política, también de filosofía, de arte y literatura, etc. aunque solo fuera para ligar y por prestigio frente a los demás.

Ahora los estudiantes se toman ir a clase como un trabajo. Van (los que van), echan sus horas, salen y a hacer vida social, al parque, al botellón, etc. Llegan los exámenes, se encierran, lo estudian y lo mismo sacan un diez.

Pero ya no se vive la cultura en la universidad.

jueves, 14 de octubre de 2010

LOS MUÑECOS DEL CONGRESO



Los judíos dicen: «Los cristianos carecen de base», y los cristianos dicen: «Los judíos carecen de base»


A estas alturas todos damos por hecho que en el Congreso de los Diputados no existe debate ni opinión. A cada diputado que le toca hablar ya se sabe de antemano lo que va a decir. Por eso no tiene el mínimo interés ver los debates televisados, y por eso en la práctica no notaríamos ninguna diferencia si nos cargásemos de un plumazo a todos los diputados.

Todo sería más claro y desde luego más económico si el pulsador de Mariano Rajoy valiera 154 votos y el del señor Zapatero valiera 169, y quitando a los más de 300 muñecos que sólo sirven para aplaudir y abuchear nos ahorraríamos en total, a ojo de buen cubero, cerca de un millón y medio de euros MENSUALES, sin contar pensiones vitalicias.

Otra posibilidad más democrática, y por tanto más liosa y menos rentable, son las famosas listas abiertas o el menos conocido voto preferencial. Dicen que las listas abiertas ya llevan varios años funcionando para el Senado, pero que no las usa ni el tato, y los políticos se aferran a ese argumento para no ponerlas en marcha para el Congreso. El populacho sin necesidad de entrar en detalles sabe que el Senado no es donde se cuecen las habas, ni las listas de senadores suelen contener nombres conocidos como las de diputados al Congreso.

Y luego está el tema de la democracia interna en los partidos, en eso el PSOE le ha dado ya dos veces sopas con honda al PP. La primera y más notoria fue ya hace diez años, en el 2000; pero esta última y más reciente por la candidatura para Madrid ha tenido el don de la oportunidad, dos años después de que en el PP se instaurase la doctrina “democracia interna no, que debilita”, cuando se ha visto que ocurre justo lo contrario, primero se genera atención (¿o las primarias demócratas de EEUU entre Clinton y Obama no monopolizaron los medios durante meses?), y después el ganador sale fortalecido. Luego ya podrá perder o no, pero siempre partirá con tres goles de ventaja frente a un delfín puesto a dedo.

miércoles, 13 de octubre de 2010

LA GENERACIÓN CANAL+, ODIAR PARA AMAR



Sabe trabajar el oro, la plata, el bronce, el hierro, la piedra y la madera, la púrpura escarlata, la púrpura violeta, el lino fino y el carmesí. Sabe también hacer toda clase de grabados y ejecutar cualquier obra que se le proponga.


En el año 1990 nacía Canal+, el primer canal de televisión de pago en España. Poco se ha dicho o escrito de la enorme influencia de esta cadena en aquella década pasada. El lema publicitario con el que se bautizaron consistía en poner en las revistas fotos en blanco y negro de antiguos actores famosos con la cita “El cine ha muerto”, y contraponerlas con otras fotos en color de actores del momento (Sharon Stone o quien fuera) con el lema “Viva el cine”.

Pues bien, ya podemos decir que uno de los grandes culpables de una generación importante de españoles que no ha visto cine en blanco y negro en su vida ha sido Canal+. Presentó el cine como algo casi periodístico y de pura actualidad, se inculcó la idea por la cual cualquier producto que tuviera más de 4 o 5 años no interesaba.

Para muchos jóvenes, y otros snobs no tan jóvenes, lo más moderno y lo más in era ver Canal+. Y si te veías una película de ‘Los tres mosqueteros' de Gene Kelly eras lo peor. ¿Hay que odiar y despreciar una cosa para amar otra?

Es cierto que en aquellos momentos las salas de cine estaban bastante mal, la creación de más cadenas de televisión y el VHS había tenido un gran impacto en la forma de consumir cine en casa, y Canal+ consiguió relanzar el interés por los estrenos, lo nuevo, la actualidad. Por ejemplo rescataron la gala de los Oscars, que había dejado de emitirse, es innegable que la gente comenzó a saber mucho de la actualidad del cine, y sin embargo destruyó por completo el interés por el cine clásico.

Tuvo que llegar la era de Canal Satélite (no es lo mismo llenar un canal de películas actuales, que llenar más de una docena, hay que tirar de lo viejo) y de Internet con las grandes bases de datos, para que la afición al cine entre los españoles dejara de ser pura actualidad.

Y aún así, aunque se ha rescatado el cine de los 70 (la generación sagrada de los Coppola, Scorsese, Allen, Spielberg, etc.), sigue habiendo mucha gente con grandes problemas para poder ver una película en blanco y negro de los 50 hacia atrás (es decir, que no sea ‘La lista de Schindler').

Pero no sólo de cine vive el hombre. También el mundo de las series provenientes de los canales de pago americanos, que ahora gozan de cuotas enormes, nació en Canal+. Desde Friends y Seinfeld hasta Los Soprano y Sexo en Nueva York, de ahí vienen las actuales Lost, House, Prison Break, etc. Incluso el mundo grunge, los conciertos, Nirvana y Kurt Cobain, etc. crecieron al abrigo de este canal.

También es curioso que aún teniendo un punto sociopolítico de izquierdas, asociada a un grupo mediático que todos conocemos, en el fondo era una televisión elitista y de pago, que no era barata, y que mucha gente sólo veía Canal+ alguna vez en el bar mientras se tomaba una caña para ver el partido con Michael Robinson.

Y no hay que olvidar el programa “Lo + plus” de Fernando Scwartz y Máximo Pradera que fue un auténtico boom, mil veces imitado desde entonces, y si uno lo viera ahora diría pero bueno, qué tonterías de entrevistas hacían, y eso que a veces llevaban a personajes de calado intelectual, pero todo se basaba en las anécdotas, las gracietas, etc. y el invitado pasaba sin pena ni gloria respondiendo a chorradas de un nivel cultural paupérrimo.

Y es ese formato de entrevista desenfadada el que sigue triunfando hoy, lo que menos importa es qué le van a preguntar al famoso, lo importante es que está el famoso y hacemos con él un poco el chorra.

Iniciación Masónica, Mozart en Viena - de Ignaz Unterberger