Cuando el Señor vio qué grande era la maldad del hombre en la tierra y cómo todos los designios que forjaba su mente tendían constantemente al mal, se arrepintió de haber hecho al hombre sobre la tierra, y sintió pesar en su corazón.
Alejandro es un tipo sin nacionalidad, si Alejandro fuera romano, francés o alemán, sería maltratado y vilipendiado, pero no deja de ser un antiguo griego macedonio, y por eso realmente no molesta a nadie, se le puede ensalzar y caer bien a todo el mundo.
También le pasa a Aníbal, un tipo de una civilización que no ha dejado ningún legado, y así vemos como en muchísimas publicaciones y entre muchísimos aficionados a la historia militar, ¿el mejor general del mundo? Aníbal.
Lo que pasa que hoy Aníbal resulta más belicoso y políticamente incorrecto (por eso gusta tanto a los frikis de la historia militar) y en cambio Alejandro con sus viajes por medio mundo, su juventud, sus amoríos, su muerte trágica y antes de tiempo, es casi Kurt Cobain o James Dean, un chico rebelde y romántico.
.
No hay comentarios:
Publicar un comentario